¿Por qué es importante hablar acerca del sello de Dios? ¿Por qué Dios pone su sello? ¿A quiénes el Señor pone su sello? ¿Habla la Biblia sobre los sellados?
Introducción:
El Sello era la señal que servía mayormente para identificar la propiedad o era una indicación de autoridad. Se ponía un sello para marcar las vasijas de vino o aceite, así como en otros enseres. Esto se hacía antes de poner el barro al fuego.
Los sellos eran, en su mayoría, en forma de anillo o de cilindros. Con el desarrollo de la escritura en la Mesopotamia, se usaban los s. para firmar documentos en tablillas cuneiformes. Los egipcios usaban sobre rollos de papiro.
Poner el sello sobre una cosa implicaba que el objeto estaba terminado y se indicaba quien era su dueño, en distintas ocasiones se utiliza el término como metáfora. “Te pondré como anillo de sellar”, dijo Dios a Zorobabel (Hageo 2:23).
El sello indicaba, además, autenticidad y propiedad. Así, se dice que los creyentes han sido “sellados con el Espíritu Santo de la promesa” (Efe_1:13). La presencia del Espíritu Santo, entonces, demuestra que realmente somos de Dios y que nuestra fe es auténtica.
Se amarraba una carta o un rollo con una cinta o una cuerda pequeña que se cerraba con un sello de una manera que sólo el destinatario debía abrir. Por eso se habla de “sellar la visión y la profecía” (Daniel 9:24).
En la visión de Juan aparece “un libro escrito... sellado con siete sellos” (Apocalipsis 5:1) que el Cordero es el único que puede abrir (Apocalipsis 5:1-9; Apocalipsis 6:1-12; Apocalipsis 8:1).
Arqueólogos israelíes han descubierto en Jerusalén un sello de unos 2.500 años de antigüedad que, según algunos expertos, confirma la teoría de que la Biblia se puede emplear como fuente de documentación histórica.
En el sello aparecen en caracteres hebreos arcaicos el nombre de la familia Temech, que de acuerdo con el Libro de Nehemías figuró entre los exiliados que regresaron a Judea en el 537 antes de Cristo tras el fin de su cautiverio en Babilonia, en el actual Irak.
Fuente:http://origenesis.blogspot.com/2010/10/hallazgo-de-sello-que-confirma-la.html
Sellados por el Espíritu Santo
“En él también vosotros, habiendo oído la palabra de verdad, el evangelio de vuestra salvación, y habiendo creído en él, fuisteis sellados con el Espíritu Santo que es las arras de nuestra herencia hasta la redención de la posesión adquirida, para alabanza de su gloria.” (Efesios 1:13, 14)
Según el diccionario Strong, la palabra sellados” proviene del griego “sfragízo” y significa estampar (con anillo o marca privada) para seguridad o preservación.
Por su fe en Cristo, el creyente es sellado con el Espíritu Santo, garantizándosele la redención y la salvación (vers. 14). El sello es señal de propiedad, lo que indica que el creyente pertenece a Cristo.
La palabra “arras”, viene del hebreo “Arrabón”; promesa, y se refiere a la parte del dinero de compra o propiedad que se daba por adelantado como garantía.
Arrabón describe al Espíritu Santo como la promesa de nuestro gozo y de nuestra bendición futura en el cielo. El Espíritu Santo nos da una prueba anticipada o garantía de las cosas que vendrán después.
Al respecto el Apóstol Pablo dice: “Y el que nos confirma con vosotros en Cristo, y el que nos ungió, es Dios, el cual también nos ha sellado, y nos ha dado las arras del Espíritu en nuestros corazones.” (2 Corintios 1:21, 22)
La palabra ungir “jrío” utilizada en el versículo anterior, según el diccionario Strong significa: untar o frotar con aceite, con el propósito de consagrar a alguien para ejercer un oficio o servicio religioso.
El Sello y el Don de Lenguas
El sello que recibe el creyente es el “espíritu Santo” y no el “don de lenguas”. El don de lenguas es una evidencia del Espíritu Santo en nosotros, al igual que otros dones. La Biblia dice que el don de lenguas ha sido conferido como “señal” para los incrédulos y no para los creyentes (1 Corintios 14:22).
La palabra “señal” viene del hebreo “semaíno”: dar a entender, informar, declarar (un idioma que puede ser terrenal o angelical).
Diccionario Strong: γλῶσσα “glossa” lengua; por implicación lenguaje, idioma (específicamente uno adquirido no naturalmente
Dijimos que el que tiene el “sello” del Espíritu Santo, tiene una señal de propiedad que indica que pertenecemos a Cristo.
Si sólo los que hablan en lenguas son sellados, entonces se contradecirían las Escrituras, porque ¿Qué sucede con los hermanos que no hablan en lenguas pero sí han recibido otros dones por el mismo Espíritu?
Recordemos lo que nos dice en 2 Corintios 1: 22 “…nos ha sellado, y nos ha dado las arras del Espíritu en nuestros corazones”, Todos los dones son una evidencia manifiesta de que el Espíritu Santo nos ha sellado para que seamos testigos de Cristo (Hechos 1:8).
La palabra “testigo” tiene la siguiente definición… μάρτυς “mártus”: testigo (judicial); por analogía «mártir»: mártir, testigo, testimonio.
Dicho de otra forma, un creyente utiliza los dones del Espíritu Santo con el que ha sido sellado, para dar testimonio del martirio del Señor Jesucristo para lavarnos de nuestros pecados, y para dejar, judicialmente, convictos a los impíos que rechazan a Jesús como su Salvador (Judas 1:15).
No hay salvación sin derramamiento de sangre inocente (Hebreos 9:22), ni existe gracia sin el Cordero (Efesios 2:5).
La señal en las puertas de las casas (Éxodo 12:7, 13)
La seguridad de los primogénitos de Israel no dependía del hecho de ser pueblo de Dios, sino que era fundamental que sus casas tuviesen la señal de la sangre en sus puertas; el israelí que no marcase su puerta con sangre del Cordero corría un riesgo mortal. La muerte del Cordero no tiene ningún valor si su sangre no se aplica en la puerta del corazón.
La Señal de Rahab (Josué 2: 9, 10, 12, 13)
Su nombre “Rakjáb” significa; orgullosa
Rahab era una pobre prostituta canaanita que vendía su cuerpo junto a la puerta de la ciudad. Su vida estaba destruida, no tenía muchas expectativas, sus sueños habían naufragado, a medida que envejecía con toda certeza los hombres no la buscarían más.
Ella había oído de la victoria del pueblo de Israel sobre los egipcios en el paso del Mar Rojo y en ello vio la mano de Dios, había oído de la victoria sobre los dos reyes amorreos y en ello vio que Jehová era con ellos.
Israel a pesar de las muchas señales, milagros y prodigios que Jehová había hecho con ellos, se volvieron a la idolatría, a la murmuración, manifestando con su actitud al “hombre carnal”, pero en cambio, Rahab, una mujer gentil por lo que oyó, creyó en el Dios de Israel, no había sido testigo ocular, pero se aferró como única esperanza a la salvación por medio de Jehová, no se aferró a la seguridad de los hombres armados que cuidaban la ciudad, ni tampoco a los enormes muros que la circundaban.
Tuvo fe, porque creyó que nada iba a impedir el triunfo de los ejércitos de Jehová, porque se dio cuenta que todos los que hicieron oposición a Israel fueron completamente derrotados no quedando nadie con vida. Rahab representa la simiente espiritual.
Tuvo misericordia de los espías y les rogó por la salvación de los de su casa, a lo cual ellos en forma profética, sin saberlo, le dijeron que pusiese un cordón rojo en la ventana de la casa, y todo el que estuviera dentro sería salvo.
Imaginémonos por un momento cual fue la actitud de Rahab después que los espías se fueron, seguramente corrió a casa de su padre para decirles “vengan pronto a mi casa para protegerse, porque esta ciudad será destruida”, seguramente corrió también para avisarle a sus parientes y amigos.
Las Escrituras no nos dice cuántos aceptaron la invitación, pero nos cuentan que cuando llegó el día, la salvación de Rahab y la de los que creyeron dependió de un cordón de grana colgado de la ventana de su casa.
Esa era la señal, Dios nunca destruye nada sin señalar previamente a sus siervos.
El cordón de grana era un símbolo de la sangre de Cristo. Un día Jesús murió en la cruz y derramó su sangre para salvar a la humanidad.
Era el cumplimiento de los sacrificios de corderos del A.T. que apuntaban a ese sacrificio mayor que ofrecería Cristo en el Calvario... “De tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su hijo unigénito, para que todo aquél que en él cree no se pierda, si no tenga vida eterna”. (Juan 3:16)
... Para todo aquel que en él cree, eso es lo que importa, no hay pasado que él no pueda perdonar, Rahab era prostituta, rechazada por la sociedad, pero creyó y recibió señal para su protección... “Si oís hoy su voz, no endurezcáis vuestros corazones” (Hebreos 4:7)
Rahab está en la lista de la genealogía de Cristo (Mt 1:5), y es una ilustración de la misericordia de Dios. Ella demostró su fe al esconder a los espías (Hebreos 11:31; Santiago 2:25).
El Diablo también tiene su Sello
“Y el tercer ángel los siguió, diciendo en alta voz: Si alguno adora á la bestia y á su imagen, y toma la señal en su frente, ó en su mano,” (Apocalipsis 14:9)
Satanás es un imitador, podríamos decir que la señal en la frente de los impíos es en el “dintel” de la casa (cabeza) terrenal, y la señal en la mano de los impíos, es en los postes (brazos) de la casa terrenal (La mano en los tiempos bíblicos era considerada desde el codo hasta el extremo de los dedos).
La Señal de Dios
“Y les fué mandado que no hiciesen daño á la hierba de la tierra, ni á ninguna cosa verde, ni á ningún árbol, sino solamente á los hombres que no tienen la señal de Dios en sus frentes.” (Apocalipsis 9:4)
El versículo anterior dice que la señal de Dios es puesta en la frente de los hijos de Dios.
¿Cuál es la señal en las frentes?
La Biblia dice “Y no habrá más maldición; y el trono de Dios y del Cordero estará en ella, y sus siervos le servirán, y verán su rostro, y su nombre estará en sus frentes.” (Apocalipsis 22:3, 4)
La señal es el nombre del Cordero, y su nombre, que es por sobre TODO nombre… es JESÚS, Rey de Reyes y Señor de Señores.
Textos de Consulta
• Diccionario Real Academia Española
• Diccionario Strong
• Nuevo Diccionario de la Biblia – Alfonso Lockward
• Notas Biblia de Las Américas
• Biblia Reina Valera 1909
Gracia y paz en el nombre del Señor Jesucristo
Pastor José García
Martes 10 de mayo de 2005; actualizado en marzo de 2014.-
Introducción:
El Sello era la señal que servía mayormente para identificar la propiedad o era una indicación de autoridad. Se ponía un sello para marcar las vasijas de vino o aceite, así como en otros enseres. Esto se hacía antes de poner el barro al fuego.
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| Sello con forma de candelabro empleado para marcar el pan hace más de 1.500 años. |
Poner el sello sobre una cosa implicaba que el objeto estaba terminado y se indicaba quien era su dueño, en distintas ocasiones se utiliza el término como metáfora. “Te pondré como anillo de sellar”, dijo Dios a Zorobabel (Hageo 2:23).
El sello indicaba, además, autenticidad y propiedad. Así, se dice que los creyentes han sido “sellados con el Espíritu Santo de la promesa” (Efe_1:13). La presencia del Espíritu Santo, entonces, demuestra que realmente somos de Dios y que nuestra fe es auténtica.
Se amarraba una carta o un rollo con una cinta o una cuerda pequeña que se cerraba con un sello de una manera que sólo el destinatario debía abrir. Por eso se habla de “sellar la visión y la profecía” (Daniel 9:24).
En la visión de Juan aparece “un libro escrito... sellado con siete sellos” (Apocalipsis 5:1) que el Cordero es el único que puede abrir (Apocalipsis 5:1-9; Apocalipsis 6:1-12; Apocalipsis 8:1).
En el sello aparecen en caracteres hebreos arcaicos el nombre de la familia Temech, que de acuerdo con el Libro de Nehemías figuró entre los exiliados que regresaron a Judea en el 537 antes de Cristo tras el fin de su cautiverio en Babilonia, en el actual Irak.
Fuente:http://origenesis.blogspot.com/2010/10/hallazgo-de-sello-que-confirma-la.html
Sellados por el Espíritu Santo
Según el diccionario Strong, la palabra sellados” proviene del griego “sfragízo” y significa estampar (con anillo o marca privada) para seguridad o preservación.
Por su fe en Cristo, el creyente es sellado con el Espíritu Santo, garantizándosele la redención y la salvación (vers. 14). El sello es señal de propiedad, lo que indica que el creyente pertenece a Cristo.
La palabra “arras”, viene del hebreo “Arrabón”; promesa, y se refiere a la parte del dinero de compra o propiedad que se daba por adelantado como garantía.
Arrabón describe al Espíritu Santo como la promesa de nuestro gozo y de nuestra bendición futura en el cielo. El Espíritu Santo nos da una prueba anticipada o garantía de las cosas que vendrán después.
La palabra ungir “jrío” utilizada en el versículo anterior, según el diccionario Strong significa: untar o frotar con aceite, con el propósito de consagrar a alguien para ejercer un oficio o servicio religioso.
El Sello y el Don de Lenguas
El sello que recibe el creyente es el “espíritu Santo” y no el “don de lenguas”. El don de lenguas es una evidencia del Espíritu Santo en nosotros, al igual que otros dones. La Biblia dice que el don de lenguas ha sido conferido como “señal” para los incrédulos y no para los creyentes (1 Corintios 14:22).
La palabra “señal” viene del hebreo “semaíno”: dar a entender, informar, declarar (un idioma que puede ser terrenal o angelical).
Diccionario Strong: γλῶσσα “glossa” lengua; por implicación lenguaje, idioma (específicamente uno adquirido no naturalmente
Dijimos que el que tiene el “sello” del Espíritu Santo, tiene una señal de propiedad que indica que pertenecemos a Cristo.
Si sólo los que hablan en lenguas son sellados, entonces se contradecirían las Escrituras, porque ¿Qué sucede con los hermanos que no hablan en lenguas pero sí han recibido otros dones por el mismo Espíritu?
Recordemos lo que nos dice en 2 Corintios 1: 22 “…nos ha sellado, y nos ha dado las arras del Espíritu en nuestros corazones”, Todos los dones son una evidencia manifiesta de que el Espíritu Santo nos ha sellado para que seamos testigos de Cristo (Hechos 1:8).
La palabra “testigo” tiene la siguiente definición… μάρτυς “mártus”: testigo (judicial); por analogía «mártir»: mártir, testigo, testimonio.
Dicho de otra forma, un creyente utiliza los dones del Espíritu Santo con el que ha sido sellado, para dar testimonio del martirio del Señor Jesucristo para lavarnos de nuestros pecados, y para dejar, judicialmente, convictos a los impíos que rechazan a Jesús como su Salvador (Judas 1:15).
No hay salvación sin derramamiento de sangre inocente (Hebreos 9:22), ni existe gracia sin el Cordero (Efesios 2:5).
La señal en las puertas de las casas (Éxodo 12:7, 13)
La Señal de Rahab (Josué 2: 9, 10, 12, 13)
Rahab era una pobre prostituta canaanita que vendía su cuerpo junto a la puerta de la ciudad. Su vida estaba destruida, no tenía muchas expectativas, sus sueños habían naufragado, a medida que envejecía con toda certeza los hombres no la buscarían más.
Ella había oído de la victoria del pueblo de Israel sobre los egipcios en el paso del Mar Rojo y en ello vio la mano de Dios, había oído de la victoria sobre los dos reyes amorreos y en ello vio que Jehová era con ellos.
Israel a pesar de las muchas señales, milagros y prodigios que Jehová había hecho con ellos, se volvieron a la idolatría, a la murmuración, manifestando con su actitud al “hombre carnal”, pero en cambio, Rahab, una mujer gentil por lo que oyó, creyó en el Dios de Israel, no había sido testigo ocular, pero se aferró como única esperanza a la salvación por medio de Jehová, no se aferró a la seguridad de los hombres armados que cuidaban la ciudad, ni tampoco a los enormes muros que la circundaban.
Tuvo fe, porque creyó que nada iba a impedir el triunfo de los ejércitos de Jehová, porque se dio cuenta que todos los que hicieron oposición a Israel fueron completamente derrotados no quedando nadie con vida. Rahab representa la simiente espiritual.
Imaginémonos por un momento cual fue la actitud de Rahab después que los espías se fueron, seguramente corrió a casa de su padre para decirles “vengan pronto a mi casa para protegerse, porque esta ciudad será destruida”, seguramente corrió también para avisarle a sus parientes y amigos.
Las Escrituras no nos dice cuántos aceptaron la invitación, pero nos cuentan que cuando llegó el día, la salvación de Rahab y la de los que creyeron dependió de un cordón de grana colgado de la ventana de su casa.
Esa era la señal, Dios nunca destruye nada sin señalar previamente a sus siervos.
El cordón de grana era un símbolo de la sangre de Cristo. Un día Jesús murió en la cruz y derramó su sangre para salvar a la humanidad.
Era el cumplimiento de los sacrificios de corderos del A.T. que apuntaban a ese sacrificio mayor que ofrecería Cristo en el Calvario... “De tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su hijo unigénito, para que todo aquél que en él cree no se pierda, si no tenga vida eterna”. (Juan 3:16)
... Para todo aquel que en él cree, eso es lo que importa, no hay pasado que él no pueda perdonar, Rahab era prostituta, rechazada por la sociedad, pero creyó y recibió señal para su protección... “Si oís hoy su voz, no endurezcáis vuestros corazones” (Hebreos 4:7)
Rahab está en la lista de la genealogía de Cristo (Mt 1:5), y es una ilustración de la misericordia de Dios. Ella demostró su fe al esconder a los espías (Hebreos 11:31; Santiago 2:25).
El Diablo también tiene su Sello
Satanás es un imitador, podríamos decir que la señal en la frente de los impíos es en el “dintel” de la casa (cabeza) terrenal, y la señal en la mano de los impíos, es en los postes (brazos) de la casa terrenal (La mano en los tiempos bíblicos era considerada desde el codo hasta el extremo de los dedos).
La Señal de Dios
El versículo anterior dice que la señal de Dios es puesta en la frente de los hijos de Dios.
¿Cuál es la señal en las frentes?
La Biblia dice “Y no habrá más maldición; y el trono de Dios y del Cordero estará en ella, y sus siervos le servirán, y verán su rostro, y su nombre estará en sus frentes.” (Apocalipsis 22:3, 4)
La señal es el nombre del Cordero, y su nombre, que es por sobre TODO nombre… es JESÚS, Rey de Reyes y Señor de Señores.
Textos de Consulta
• Diccionario Real Academia Española
• Diccionario Strong
• Nuevo Diccionario de la Biblia – Alfonso Lockward
• Notas Biblia de Las Américas
• Biblia Reina Valera 1909
Gracia y paz en el nombre del Señor Jesucristo
Pastor José García
Martes 10 de mayo de 2005; actualizado en marzo de 2014.-